viernes, 30 de mayo de 2008

Un nuevo volumen de una de las biblias de la creatividad mundial, el One Show, que hace el número veintinueve de su colección. Un anuario sin novedades destacables salvo el hecho de que los responsables, atentos a las necesidades de los nuevos lenguajes en el mundo de la comunicación actual, han decidido dividir el anuario en tres libros diferentes, cada uno de ellos dedicado a un sector: Diseño, Publicidad e Interactivos. Una buena idea que no acaba de cuajar en el caso concreto de los interactivos por ser este un campo que, por definición, difícilmente puede trasladar su experiencia interactiva y multimedia a papel.
Los otros dos, Diseño y Publicidad, resultan mucho más interesantes a pesar de que muchos de los trabajos aparecen repetidos en ambos volúmenes. Esto sucede, bien porque son trabajos que compiten en las dos disciplinas o porque tienen un desarrollo tanto en los medios típicamente publicitarios –como televisión, gráfica para prensa, marquesinas, o vallas–, como en aquellos más afines al diseño gráfico –como el packaging o la cartelería–.
En estos dos últimos casos, cabe mencionar un hecho que, de un tiempo a esta parte, está siendo percibido por clientes y profesionales del sector. Concretamente, la tendencia del diseño gráfico a desarrollar trabajos serios, maduros y duraderos en el tiempo, mientras que la publicidad ha optado últimamente por producir trabajos efímeros, estrechamente relacionados con las tendencias de moda en cada momento y que recurren al chiste, a la paradoja o al tranpantojo como recurso efectista para captar la atención de cliente.
A pesar de todo, y como es habitual en este tipo de anuarios, el One Show es un magnífico termómetro para tomarle la temperatura al mundo de la creatividad y asombrarse de cómo es posible que, independientemente de los muchos trabajos que se publican año tras año, la imaginación de los profesionales del diseño y la publicidad no se agota.
The One Show, Vol. 29. Advertising, Design, Interactive. Varios autores. One Club Publishing. 408 Páginas. Idioma: Inglés

lunes, 26 de mayo de 2008

Se rumorea... dicen por ahí... que, en el futuro, Internet y la informática provocarán que ya no se use el papel como soporte para imprimir y transmitir mensajes. Según aquellos que esto defienden, cuando suceda, los bosques lucirán frondosos y los ojos no se nos saldrán de las órbitas al leer directamente de la pantalla porque los sistemas tecnológicos habrán avanzado que es una barbaridad. Sin embargo, a la vista de los magníficos ejemplos de trabajos que aparecen en Choosing ad using paper no nos queda más remedio que compadecer a los agoreros y a los bosques pues, por mucho que avance la informática, habrá cosas en las que ésta nunca podrá igualar al papel.
Aquellos que aún lo duden no tienen más que ver este nuevo volumen editado por RotoVisión que, además de ser una fuente infinita de sorpresas, es una magnífica guía para saber manejar los papeles de forma óptima. Una herramienta imprescindible para todo diseñador que contiene ejemplos de troqueles, desarrollos, fichas técnicas que incluyen el nombre del cliente y el estudio y, lo más importante, el tipo de papel en el que se ha realizado.
Además, analizando los diferentes ejemplos, el diseñador encontrará pistas sobre cómo tratar los diferentes tipos de papel según sus gramajes o según sean offset, estucados, brillo, semimate, mate, reciclados... Asimismo se adjunta un sobre con muestras de diferentes papeles y un glosario de términos con los que comunicarse con los profesionales de las imprentas, aunque, eso sí, siempre que unos y otros hablen inglés pues, hasta que se publique la edición española, ese es el idioma en el que está escrito todo el libro.
En definitiva, una herramienta de trabajo que, además de útil es, por la altísima calidad de los trabajos incluidos, una continua fuente de inspiración (o desesperación, según se mire).

Choosing and using paper for great graphic design. Mark Hampshire, Keith Stephenson. Ed. Rotovision. 256 páginas. Idioma: Inglés

viernes, 23 de mayo de 2008

Stephen Shore es uno de los fotógrafos norteamericanos más destacados de la segunda mitad del siglo XX. Buena parte de sus instantáneas de la vida cotidiana, sus paisajes urbanos, sus bodegones o retratos, se han convertido en iconos de la historia fotográfica reciente y su personal forma de entender la imagen. Shore, en ocasiones heredero de figuras ya clásicas como Egglestone, ha establecido nuevos cánones visuales que a su vez también han sido desarrollados por innumerables profesionales, tanto en el campo de la imagen fija como en el de la imagen en movimiento.
A pesar de esta evidente repercusión de la obra de Shore, presente en reportajes de prensa, vídeo clips o spots publicitarios, lo cierto es que poco se sabe de su vida o sus reflexiones acerca de la fotografía. Es por esta razón por la que este volumen editado por la editorial Pahidon resulta un material excepcional que completa todos los demás libros y catálogos publicados anteriormente por Shore.
Un libro en el que el lector podrá encontrar un interesante estudio sobre la obra de este profesional, así como una entrevista realizada por Michael Fried y diversos escritos firmados por el propio Shore que repasan una magnífica y abultada carrera, desde sus primeros trabajos durante su etapa de estudiante en el instituto, hasta la actualidad, pasando por proyectos como el que realizó en la Factory de Andy Warhol a mediados de los años 60.
Stephen Shore. C. Lange, M. Fried, J. Sternfeld. Ed. Phaidon. 160 páginas. Idioma:Inglés.

domingo, 4 de mayo de 2008


Quizá le venga un poco grande el título a este libro. Responder a un cuestionario estándar de modo telegráfico, el mismo para los 135 participantes, no es lo que algunos entendemos por "hablar sobre". Matizado esto, hay que decir que aunque la fórmula resulta agotadora, porque se presta a la perogrullada y lo obvio, algunas perlas se esconden. Por ejemplo, que un diseñador afirme que no le interesan en absoluto la arquitectura o los diseños de otros, es una grosería... si el que lo dice es Starck, es simplemente una imbecilidad.
A las entrevistas se antecede una cronología a través de los objetos de 1900 a 2000, que no por obvia deja de ser interesante. Y una interesante reflexión argumentada sobre el futuro del diseño.
En definitiva, un libro sobre diseño industrial para "no diseñadores", bien documentado y del que al final se desprende que más allá de algunas ausencias, nos permite una acertada aproximación al diseño de objetos contemporáneo.

Los diseñadores hablan sobre el diseño. Terence Conran y Max Fraser. Ed. Blume. 258 páginas. Idioma: español.