La ilustración es una de las disciplinas con más posibilidades en el campo del diseño gráfico y las artes aplicadas. De hecho, hasta la popularización del retoque fotográfico gracias al Photoshop (que por otra parte, habría que ver si no es otra forma de ilustración más que de fotografía), la ilustración permitía llegar, e incluso ir más allá, de los límites que imponía la toma fotográfica, siempre tan apegada a la realidad. Ilustración era sinónimo de imaginación, de mundos imposibles, de creatividad desbordada, de infinitas técnicas, acabados y ejecuciones.
A pesar de todas estas virtudes, la ilustración no ha sido lo suficientemente valorada por la comunicación comercial, más amiga de la fotografía, y ha tenido que buscar su hueco en la ilustración infantil, sector en la que no paran de surgir nuevos profesionales, que además de poseer una altísima calidad artística, disfrutan en ese ámbito editorial de una gran libertad creativa.
Imágenes que cuentan recoge algunos de estos nuevos ilustradores y reproduce muestras de sus trabajos junto a una breve nota biográfica, curiosamente, compuesta en Courier o American typewriter, tipografías poco frecuentes en el mundo editorial actual.
Nombres como el francés Serge Bloch, el italiano Maurizio Quarello, la iraní Morteza Zahedi, la coreana Ko Kyung Sook, el japonés Taro Miura, o Elena Odriozola, entre otros, demuestran con sus creaciones la curiosa paradoja de que la ilustración infantil posee una madurez que para sí la quisiera aquella que, con frecuencia, aparece publicada en los medios para adultos.
Imágenes que cuentan. Nueva ilustración de libros infantiles. Martin Salisbury. Gustavo Gili. 160 páginas. Español