lunes, 18 de mayo de 2015

El perfeccionismo geométrico y en las porporciones es un riesgo en el dibujo de historietas, con frecuencia se traspasa la fina línea de lo impersonal y repetitivo. Cuando eso no sucede, el resultado es magnífico. Es el caso de Inercia. Una historia de desencanto, precariedad, disfunciones afectivas y pinceladas de poética, lo que los clásicos llamarían realismo social. Con una austera gama cromática y planos sencillos, Antonio Hitos se entrega a la narración sin estridencias.
Antonio Hitos (Huelva, 1985) se inicia en los cómics a finales de los años 90 publicando sus primeras historias cortas en un fanzine onubense. A los 18 años se traslada a Sevilla para licenciarse en Comunicación Audiovisual, y desde allí comienza a colaborar con otros fanzines andaluces, pasando poco después a publicar en las páginas de la revista El Víbora hasta el cierre de la misma en 2004. Desde entonces ha ilustrado story-boards, carteles, libros y discos, pero también ha tenido tiempo de trabajar vendiendo música y videojuegos, emigrar a Reino Unido a vender zapatos, y volver para seguir dibujando. Inercia es su primera obra larga.

Inercia. Antonio Hitos. Ed. Salamandra
128 páginas. 17,5x25,5 cm. Castellano